CESFAM Lás Pérgolas, Clarita González, rut: 5999654 -0, le entregué lo números de contención emocional gratuita pero requiere de seguimiento y apoyo emocional, día comunicación: 21.05.2021 00:19

Buscando cariños virtuales y la pantalla que te acompaña siempre responde con vibraciones y mensajes de movistar de llamadas de números que no existen. Sueñas que una persona antes cercana querida se entromete en tu vida más íntima y luego está triste deseas ayudarla y desaparece o más bien se esconde dentro del celular. Tratas de mover la imagen y aparece tu propio reflejo en la cámara

Del celular

Un grupo de Whatsapp pero no puedes ver los mensajes éramos amigas ni veo nada cambiarme de ropa busco en el celular nuevamente a esa persona. No responde. No responde. No responde. No responde.

No tiene tiempo quizás me dicen otras personas. Le dejé de hablar a un compañero que botó el ramo. Vivió vicio vicio miró y remito no responde. Estoy traspasando los límites? Es lo normal dejar de responder a alguien sin bloquearme y no sentir nada al respecto? Soy como ese de cual a que tomaba en serio todo hasta un juego virtual y se quedaba observando a la persona vida rel diciéndole que dijo que iba y volvía y nunca volvió a jugar?? Quiero ya que me deje de funcionar Whatsapp.

 Pero mi soledad no tiene alas. Solo una pieza desordenada. Llamadas a personas solitarias. Una pantalla. Monstruos. Dedos rotos. Soledad y búsqueda de una sonrisa aunque fuera virtual y solo hallo el reflejo del propio ser y una mediadora pantalla que sabe de mí pero no le importa nada más. Ni yo me aguardó a mí misma. Solo me quedo dormida cada día para olvidarme de mi existencia. Feliz debería estar no trabajos temporales mil pero trabajo en fin. Y aquí estoy en el suelo tirada junto a millones de papeles de cosas pendientes, una montaña de ropa sucia y otros recuerdos que aún no acabó de botar para hace espacio y dejar entrar lo nuevo los retos el crecimiento. Aquí estoy escribiendo en un Blog en el que nadie me ha respondido nunca. Aquí estoy frente a la pantalla y ni ella ni nadie aparece a salvarme de mí misma. Solo yo puedo. O no era que co-construimos un mundo mejor, que la resiliencia es colectiva y la colaboración y participación y todo eso. Sola. Estoy. La sensación del estallido social permanece en mí aunque ya no les veo. Recuerdo levemente mi soledad cuando las personas ponen sus fotos de sociabilidad, cuando celebran y pasan tiempo con otras en almuerzos cuando me preguntan y tú aun no tienes tu grupo de amigos? Ahí se devolvía esa sensación y respondía con un si tuve pero nos distanciamos un poco harto.. Pero quedaba tranquila ya que estaba desarrollándome a mí misma. Pero no es igual, después te preguntan pero ese equipo no creo que seas sólo tu coloca la foto de tu equipo sus años de experiencia y yo quedo mirando y digo sí todavía no hay un equipo no sé cómo comprometer a alguien sin un sueldo de por medio. Y así esta semana ha sido. Como ese sueño, millones de personas entrando a mi pieza mi espacio personal, íntimo de forma virtual, por ende, también entes no humanos participan del intercambio y nada. Millones de soledades sentidas en mi corazón quienes escribían ya no y quienes lo hagan no me llena les escribo y me siento desesperada por un poco de atención un poco de amor virtual. No había un mar de gente. Solo yo mi cuerpo maltratado por mi misma y mi pieza (y las plantas muriendo). Yo. Y tristemente estos días no me he parecido suficiente. Me he desanimado con todos los trabajos que he conseguido y voy constantemente en busca de más tratando de acaparar todo confiando que con la experiencia podré dirimir mejor. Pero cómo estoy viviendo la experiencia. Ni siquiera sé decir cuántos trabajos tengo actualmente y siento que estoy rindiendo el mínimo y eso me tenía cansada. En fin esa es otra historia distinta a eso de la soledad. Esa falta de abrazos. Amor. Falta de autocuidado hacia unx mismx y que la música no suple lamentablemente.

Recuerdo a esa persona que se quedó dormida en mi hombro una vez en el metro y que no recordaría sin un Post o esos encuentros fortuitos de soledad bidireccional y empatía. Dónde. Samishiii

Ni sé relacionarme por motivos distintos a trabajo y y mis intentos fallidos fuera de la línea dan cuenta de eso.